Importadores Vs industriales: ¿una guerra ambiental o comercial? - PARAGUAY

Silvio Codas, presidente del bloque importador, brinda argumentos del sector sobre uso de tripolifosfato.

Por Zunny Echagüe
zechague@5dias.com.py 

El tripolifosfato se convirtió en la “piedra del escándalo” que hoy enfrenta al sector de los industriales domisanitarios paraguayos con los importadores. Por un lado, los que juegan de local defienden una postura ecologista y pelean porque finalmente el dictamen de la Cámara de Senadores dé voto a favor de la prohibición del tripolifosfato. Pero al paso, también los importadores defienden su terreno y arguyen que esto no es más que una “guerra comercial”.

“Nosotros creemos que es una guerra comercial, es nada más para quedarse con la porción del mercado que hoy ellos no pueden suplir. 

Nuestra industria tiene una capacidad de producción que hoy tiene el 35 a 40% del mercado en polvos de lavar y el otro 60% lo ocupan los productos importados”, refirió en defensa de su gremio el empresario Silvio Codas, presidente de la Cámara Paraguaya de Empresas de Productos Domisanitarios, Higiene Personal y Afines (CAEDHPA).

Dicha nucleación -hoy con 27 empresas adheridas surgió en el 2009 cuando se desató el conflicto con una primera resolución de la Secretaría del Ambiente (SEAM), que prohibía la importación de jabones en polvo con tripolifosfato y que luego fue un decreto firmado por el Presidente Fernando Lugo y más tarde se presentó a la Cámara de Diputados con el agregado de prohibición de importación de productos domisanitarios en general, donde logró media sanción.

Los importadores creen que ciertos puntos de dicho proyecto son inviables y hasta “extemporáneos”, visto que hoy el 95% de los productos importados que se comercializan en el país ya no tienen tripolifosfato y los pocos productos que aún lo tiene -que señalan no son más de cuatro- en cuestión de unos meses ya no ingresarán al mercado nacional, siendo reemplazados por otros que no tengan dicho componente.

Dicen que el uso irá disminuyendo no justamente por el daño que pudiera ocasionar, sino por el precio alto del químico, que está obligando a muchas multinacionales a utilizar otros químicos como la zeolita.

PROPUESTAS

El planteo más fuerte es que la prohibición también alentará el comercio informal, porque hay productos que ni siquiera se fabrican en el país y ante las necesidades del consumidor, ingresarán por contrabando. 

Señalan además, que ciertos puntos del proyecto de ley son impracticables con procesos totalmente imposibles de cumplir por ser largos y costosos. “Si vamos a hablar de perjudicial, hay que hablar de la dosificación, entonces, el tripolifosfato en 10% o en 15%, incluso, no es un producto perjudicial para el medio ambiente y eso está comprobado”, remarcó el empresario Codas.

En sus aportes o pedidos de modificación de ciertos puntos del proyecto de ley, la cámara de importadores de domisanitarios sugiere que la reducción del tripolifosfato sea en forma gradual, porque de lo contrario crearía un caos por todos los productos ya ingresados y que están en las múltiples góndolas y depósitos.

Plantean que desde el 2011, la reducción del químico sea del 12,5%, en el 2012 del 10% y que esté sujeto a nueva revisión entre el 2013 y 2014. Al mismo tiempo, se muestran abiertos a un consenso con los industriales paraguayos.

CONTRABANDO

Los industriales paraguayos sostienen una "batalla ecológica", arguyendo que el tripolifosfato destruye el medio ambiente, en tanto los importadores dicen que esta defensa no es más que una "batalla comercial".

Ahora bien, quién gana y quién pierde finalmente. Según los argumentos expuestos por los integrantes del gremio de los importadores de domisanitarios, es la informalidad y el contrabando. 

"Los que más se beneficiarán no serán los industriales locales como suelen presentar, sino la gran 'maquinaria' de contrabando, ya que en otras ocasiones vimos cómo cuando se prohibía un producto, rápidamente se armaba un esquema de comercio informal de ese producto", es la postura de la CAEDHPA.

La cámara considera que el contrabando sólo roba recursos al fisco y crea una cadena de precariedad laboral y social, por lo mismo, prohibir la importación de productos con tripolifosfato de forma abrupta y no gradual, jugará en contra de todos

PUNTOS DE VISTA 

Raúl Doutreleau, Inca. 
"Si el parlamento sale en contra va a ser un despelote, un caos en el comercio"

Carmen Cosp, Iris. 
"Este es un dictamen a favor de las aguas, no se puede comercializar con el medio ambiente"

Esteban Morábito. MAHASA 
"Que la justicia dé carta libre a productos con este químico es competencia desleal"

Fuente: 5días